Joy Denis, DO, MOST.  Osteopath & Yoga Teacher

Originario de Francia, estudié Osteopatía en la Escuela Europea de Osteopatía en Inglaterra y trabajé en varias clínicas en Reino Unido durante 4 años. Llegué a Portugal en abril de 2019 después de más de un año de viajes, buscando el sol y el océano y un nuevo lugar para establecerme. Siempre sentí atracción por el agua; por lo tanto, la nueva pasión por el surf no fue una sorpresa. Antes de darme cuenta, ya estaba instalada en Peniche.

 

Descubrí el yoga cuando empecé a trabajar como osteópata en 2014 y me apasioné por él en poco tiempo. Sentí como el yoga y la osteopatía siempre habían estado unidos pero nunca me había dado cuenta. Se convirtió en una rutina diaria y empecé a ver los cambios en mí misma y en la gente que me rodeaba. Me di cuenta de que el yoga no era sólo lo que ocurre en la esterilla, sino una forma de vivir, sin saber que estaba aplicando lo que aprendía en las clases de yoga inconscientemente en mi vida diaria. 

 

Cuando dejé Inglaterra y viajé por Asia y Nueva Zelanda, pensé que no estaba preparada para enseñar y que quizás no me interesaba, pero al final decidí hacer mi formación de profesora de yoga en la India y me encantó. Los conocimientos de osteopatía eran una ventaja, pero aún me quedaba mucho por aprender. Al igual que la osteopatía, el yoga es un viaje de aprendizaje continuo. 

 

Me quedé en la escuela en la India después de terminar y enseñé allí durante un mes inmediatamente después de graduarme, fue una oportunidad increíble que me hizo darme cuenta de que me encantaba enseñar, era tan precioso ser capaz de compartir lo que cambió mi vida.

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Cada vez que enseño, trato de hacer lo mejor para compartir mis conocimientos para que el estudiante aprenda acerca de la alineación correcta como he encontrado que a menudo la falta de clave y el conocimiento de la anatomía conduce a la práctica incorrecta que puede conducir después de unos años o incluso meses a las lesiones que he visto en mi práctica de la osteopatía. 

 

Mi primera pasión, la Osteopatía, es un viaje continuo. Cada paciente es un nuevo reto, un nuevo problema que resolver.  La experiencia me ha permitido lograr resultados más rápidos en la búsqueda de la causa real del problema, con un enfoque holístico suave adaptado a cada individuo. 

 

Con mi amor por los animales, era inevitable que acabara practicando la osteopatía en animales. Sucedió en la India, mientras trabajaba como voluntaria en un centro de animales, no pude evitar intentar aliviar algunos de sus dolores. Así empecé a manipular perros, ovejas y terneros. Cuando volví a Europa hice una formación especializada en Osteopatía para perros. 

El proceso de diagnóstico a veces puede ser más complicado, ya que tenemos que confiar sólo en las habilidades de palpación, el conocimiento y la información proporcionada por el propietario, pero los resultados valen la pena hasta el final. 

 

Déjame ayudarte a mejorar hoy, no dudes en llamarme o enviarme un email si necesitas más información sobre tratamientos o clases de yoga. 

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